Ir al trabajo o asistir a cualquier evento social parece una tarea titánica para alguien que padece de Boqueras o Perleche. Una tarea tan sencilla como mirarse en el espejo, puede resultar desmoralizante por los marcados síntomas que esta afección produce en la comisura de los labios. Más allá del aspecto que presente su cara, tendrá que soportar el dolor si tiene que hablar, comer, beber y hasta conciliar el sueño por las noches.
Lo conveniente es encarar un tratamiento ni bien se observan los primeros signos. Mientras hace efecto el método terapéutico, se puede encontrar alivio con algunas remedios naturales como las que proponemos a continuación.
El investigador de la salud Dr. Bill E. Chan, menciona que los glicoalcaloides tienen efectos beneficiosos para las afecciones de la piel. La berenjena posee estos alcaloides y un método de preparación consiste en cortar una berenjena entera y sumergirla en un recipiente con vinagre de sidra de manzana a temperatura ambiente durante una semana. Los alcaloides filtrarán el vinagre y los pedazos de berenjena pueden ser descartados. La solución de vinagre se puede aplicar según sea necesario para tratar las áreas infectadas.
El aloe vera es útil ya que tiene propiedades antisépticas y calmantes. Se puede aplicar sobre el área afectada de manera regular varias veces al día. No hay necesidad de retirar el gel con agua. Si al aplicar produce alguna reacción alérgica, en alguna tienda se puede conseguir aloe vera que esté estabilizado.
El pepino es otra planta con propiedades calmantes y antibióticas. Una manera de utilizarlo es quitarle la cáscara y cortando rodajas, para aplicarlas directamente sobre la piel afectada. También se puede procesar y aplicar la pasta durante al menos veinte minutos.
Vayamos a la miel natural orgánica o al propóleos, unos de los mejores bálsamos antisépticos naturales. Hay que procurar que sea miel lo mas natural posible y que no haya sido sometida a ningún proceso químico o expuesta al calor. Se debe aplicar en el área afectada dos veces al día y dejar por 15 minutos y después enjuagar con agua tibia. Hay que resistirse a pasar la lengua por los labios cubiertos de miel, para no echar a perder el tratamiento por el efecto de la saliva.
La manteca de cacao o una crema humectante con vitamina E será ideal para mantener los labios hidratados y nutridos. Son buenas soluciones para cuando se tiene que permanecer varias horas al aire libre, sobre todo si hay bajas temperaturas y/o fuertes vientos.
Si los labios y sus adyacencias se encuentran inflamados y descamados aunque no hay lastimaduras, se puede frotar suavemente con una pizca de sal y proceder a untar con aceite de oliva. Calmará el picor y suavizará la piel.
No hay que olvidarnos de las propiedades calmantes, desinflamantes y antisépticas de la manzanilla. Hay que realizar una infusión con flores de manzanilla orgánica disecada y dejarla enfriar. Se cuela y se aplica con una gasa o algodón varias veces al día.
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